El Presidente General recibe la más alta condecoración brasileña

La insignia fue conferida en el grado de «comendador» al consocio Renato Lima
El pasado 16 de diciembre, el consocio Renato Lima de Oliveira, 16º Presidente General Internacional de la Sociedad de San Vicente de Paúl (SSVP), recibió la máxima condecoración del gobierno brasileño, concedida por el Presidente de la República, Jair Bolsonaro: la Medalla de la Orden de Río Branco.
Esta medalla fue creada en 1963 y, cada año, se destina a «premiar a quienes se hayan hecho merecedores del reconocimiento del gobierno de Brasil, sirviendo para estimular la práctica de acciones y hechos dignos de mención honorífica, así como para distinguir servicios meritorios y virtudes cívicas» (texto del reglamento de la Orden de Río Branco).


La «Orden del Río Branco» es una condecoración concedida en cinco grados: Gran Cruz, Gran Oficial, Comendador, Oficial y Caballero. La medalla del consocio Renato Lima tenía el rango de «Comendador de la República». La insignia es una cruz de cuatro brazos y ocho puntas esmaltadas en blanco, que tiene en el centro una esfera de plata con la inscripción en latín «Ubique Patriae Memor», que significa: «En cualquier lugar, siempre tendré a la Patria en mi memoria».

Desde que asumió su servicio, el Presidente General Lima de Oliveira ya ha recibido 12 títulos como «Ciudadano Honorario» y otras tres menciones brasileñas: Medalla Mérito Legislativo (2016), Medalla Mérito Legislativo Pedro Ludovico – Provincia de Goiás (2016) y Medalla Mérito de la Seguridad Pública – Distrito Federal (2022).
«Dedico todas las menciones y premios que recibo, así como los títulos de ciudadanía, a los consocios de todo el mundo, porque, en realidad, este reconocimiento no es para mí, sino para nuestros estimados miembros, que llevan la semilla vicentina a todos los rincones del planeta», destacó el consocio Renato Lima.
Y concluyó: «Los vicentinos no buscamos ningún reconocimiento humano, sólo de Dios. Sin embargo, al recibir estas medallas, los Parlamentos y los Gobiernos demuestran que valoran públicamente la grandeza de la labor vicentina para superar la miseria, la exclusión y la vulnerabilidad social».
La palabra «comendador» significa que la persona galardonada se ha distinguido por «contribuir al engrandecimiento de la sociedad, ya sea mediante su trabajo o sus influencias sociales, económicas y políticas». No es un título nobiliario y no se recibe remuneración por ello.